Alberto se encargó de formar un grupo de WhatsApp para continuar en contacto al regreso y remitirnos fotos y detalles de este fabuloso viaje. Todos los componentes hemos formado una piña. Viene el autobús a recogernos y comprobamos que nuestras maletas han sido cargadas. Durante el trayecto al aeropuerto nos despedimos de Ahmad, nuestro guía durante todo el viaje, realmente un gran profesional. Ahora otro asistente nos ayudará a facturar los equipajes y salimos en vuelo directo El Cairo-Madrid. A la llegada a la T-1 al aeropuerto Adolfo Suárez es la última despedida, un grupo se quedará en Barajas, los de Canarias esperarán su vuelo y los gallegos también. Nosotros puesto que nos quedaremos un  día en Madrid tomamos un taxi al hotel Madrid Chamartín, situado frente a la estación del AVE que mañana utilizaremos de regreso a Alicante.

Llegamos a tiempo para registrarnos y bajar a comer al bufet del hotel. A media tarde tomamos la Línea-1 del Metro y bajamos hasta la Latina buscando una tienda de deportes de montaña que conocíamos. Encontramos la prenda deseada y continuamos a la Plaza Mayor. Como buenos turistas nos tomamos unos gin-tonics recordando cosas del viaje.

Al caer la tarde y para no complicarnos buscando donde cenar nos acercamos al Mercado de San Miguel que estaba en plena ebullición. Lo primero era conseguir dos taburetes y un cachito de barra. Luego, mientras uno mantenía el sitio, el otro traía algunas viandas y cambiábamos de turno. De regreso tomamos un helado, y en Sol cogimos de nuevo la Línea-1 hasta Chamartín a descansar en el hotel.

28/05/2023

MADRID

Nuestra intención para hoy era visitar el Museo de la Fundación Mafre pero al llegar estaba cerrado por reformas hasta finales de junio. Cambiamos de programa por el Prado, solo había que seguir caminando y volver a evocar los monumentos de Madrid.

Recorrimos por Cibeles, la Puerta de Alcalá que está en obras para llegar por la iglesia de Los Jerónimos. Desde arriba comprobamos que había una larga cola pero que se movía muy rápida.  Bajamos para colocarnos en ella.

Mientras llegaba nuestro turno nos hicimos las fotos de rigor ya que en su interior no es posible. La entrada por la escalinata estaba engalanada con adornos forales de color dorado. Nos decidimos por curiosear las obras de la Colección Frick.

Seguimos callejeando por Neptuno el Retiro, las Cortes, hasta llegar a Sol, donde volvemos a coger el Metro para volver al hotel. Como ayer, no nos complicamos y comemos en el bufet. Después acarreamos maletas unos 200 metros y al AVE y casa.