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- LA OLIVERA DE GORGA, L’OLM DE MILLENA Y LA CREUETA DE BALONES, PER LA VALL DEL RIU SETA.
CÓMO LLEGAR: Por la A-7 dirección Valencia, salida en la nº 17 rotonda de San Vicente del Raspeig, dirección Alcoy por la A-7. Después de los túneles de la Font Roja, salida en la nº 442 hacia COCENTAINA/BENILLOBA por la CV-790, luego girar a la izquierda y continuar por la CV-706 y luego por la derecha con la CV-710, pasando Millena y llegar a Gorga. Aparcar en sus calles.
COMPONENTES: VICENTE, PEPE Y TOMÁS
ITINERARIO: GORGA / IZQUIERDA / CALVARI / GRANJA / DCHA. CAMINO POR BANCAL / OLIVOS AÑEJOS / IZQDA. / OLIVERA BIMILENARIA / VISTAS BRUMOSAS / TRONCOS-ASIENTOS / CEREZOS / VISTAS DE MILLENA / PLANTÁ DEL XOP / MILLENA / L’OM TRICENTENARI / IZQDA. / DCHA. / PANORAMICAS / FONT DEL COSSI / PENYA DEL DIMONI / PETROGLIFOS / VISTAS / GRAN PINO / IZQ. CAMINO SERRETA / RUINAS CORRAL / CASA DE MADERA / SENDA CREUETA / TOSSAL DE LA CREU / SENDA BAJADA A BALONES / BALONES / DCHA. / PANORAMICAS / DCHA. / OLIVOS / FONT DEL PLA / CASETA / MIRADOR / PANADERIA / GORGA.
LA RUTA: Los pueblos de la Vall de Seta los tenemos trillados en coche para llegar a rutas de la serra d’Almudaina, la Serrella, serra de Alfaro y Barranc de Malafí. Pero hoy vamos a patear algunos descubriendo pequeñas joyas en forma de árboles singulares y otros bonitos rincones.
Iniciamos desde la población de Gorga saliendo a la rotonda de entrada y seguimos por la CV-710 un trecho, pasando junto al Polideportivo y una preciosa araucaria. Si miramos hacia atrás veremos que el pueblo queda arropado por la gran mole de la Serrella.
Dejamos la carretera por la izquierda entrando por un carretil asfaltado al Calvari por un camino central con hileras de cipreses centenarios y diversas hornacinas con cerámicas del Vía Crucis, que al igual que en otros pueblos de la montaña están patrocinadas por familias de vecinos.
Bajamos de nuevo al camino pasando por delante de la nave de la Granja Zaragozi y bancales de frutales ya recolectados con vistas al Motcabrer. Dejamos el asfalto por la derecha tomando un camino por los bancales de olivos.
Es un gozo visual pasar entre ejemplares de olivos centenarios, bien cuidados y podados todavía dan frutos. Su espectacularidad está en sus troncos ennegrecidos por los años, de poca altura y gran robustez, algunos están partidos en dos.
Hacemos un giro a la izquierda e intuimos la cercanía del gran tesoro. Ubicado en los alrededores de la Sierra de Aitana, en el paraje conocido como Racó de Felip o Sobirà en el término municipal de Gorga, se encuentra este olivo peculiar de más de 2000 años de antigüedad, situado en un olivar en pleno Valle de Travadell.
Aunque por fuera no lo parece, el tronco es espectacular, con un perímetro de 13 metros, en su interior hay bancos donde pueden sentarse perfectamente quince personas. Siglos atrás los lugareños decidieron aprovechar la oquedad de su tronco para hacer una casa dentro del árbol. Poco a poco ampliaron algunas estancias más y allí vivió una familia durante años. Siendo después un refugio para pastores.
Sentarse en su interior es algo especial, es como estar dentro del corazón del árbol, puedes sentir su techo de raíces, sus brotes nuevos, y su frescor nos recuerda los cuentos de fantasía y fabulas de quienes viven dentro de un tronco. Hoy en día todavía sigue dando una buena producción de olivas.
Proseguimos subiendo para salir de los bancales con miradas brumosas a la Serrella, y más nítidas al Montcabrer y el valle. enlazamos por la derecha con el asfaltado Camí del Colmellar que nos sigue elevando.
En la parte alta, nos sorprende ver el artístico trabajo de reforestación que han realizado, talando grandes pinos y aprovechando su tocón para con la motosierra moldear varios asientos, algunos de gran diseño.
Por terreno llano el pasaje cambia, vemos las estribaciones de la serra d’Almudaina, campos de almendros y olivos jóvenes, también cerezos que no han sido recolectados, comenzamos a tener vistas cercanas de Millena.
Llegamos a la hermosa rotonda de la Plantá del Xop a la entrada del pueblo. En su centro tiene una espectacular escultura metálica alegórica de la plantación del árbol. Hay varias figuras humanas levantando el árbol con sus manos y dos zorros que contemplan el acto.
Nos adentramos en el pueblo. En su museo, Millena guarda una cruz de nácar hecha en Belén a finales del siglo XVIII, dedicada a un monje franciscano hijo de la localidad. Hay también un cuadro atribuido al Greco. Pero su joya natural está a la puerta de la iglesia de Sant Josep: l’Om Centenari.
Su edad es incierta pero supera los 300 años, con sus 10 metros de altura total, un diámetro máximo de copa de 11 metros y un perímetro de tronco de 5,30 metros, ha tenido que ser apuntalado para su buena conservación.
L’om es un árbol caducifolio de 15-20 metros de altura, con la copa amplia, algo ovalada y el tronco recto, grueso, de corteza agrietada con los años. Las ramas presentan una corteza formando costillas más o menos gruesas, y las hojas son ovaladas, con la base desigual y el borde doblemente serrado.
Florece de febrero a marzo y su fruto madura antes de que broten las hojas. Es una especie típica en parques y plazas por su valor ornamental y de sombra, además de formar parte de la vegetación de ribera de ríos y arroyos, sobre suelos frescos y bien desarrollados.
Salimos del pueblo girando a la derecha y luego a la izquierda; por camino de servicio asfaltado pasamos por el viejo deposito de aguas y después por el de moderna construcción con vistas a la Serrella entre centenarios olivos.
Con la altura las panorámicas son para Alcoy a los pies del Montcabrer y de la Font Roja, a la Serrella cada vez más cercana, y a un esplendoroso verde y cultivado valle, acotado por las grandes montañas de los alrededores.
Arribamos al Barranc de l’Agueta y a la Font del Cossí junto a las casetas de distribución del Pou de la Vaca que canalizan hasta el pueblo. Para la fuente han dejado un grifo exterior con pileta. También podemos ver, ya en el barranco, las antiguas piedras inclinadas de un lavadero.
Por encima de las casetas vemos en la dura roca las erosiones causadas por las aguas intermitentes del arroyo en las lluvias torrenciales. Un poco más a la derecha está la Penya del Dimoni, un losa inclinada que a veces han aprovechado como sester.
Sobre la losa hay un curioso petroglifo, representación incisa sobre una superficie rocosa. El conjunto consiste en una cruz y diversos signos accesorios, como dos figuras en forma de ocho a los cuartos superiores derecho y inferior izquierdo. Las dimensiones son de 2,10 metros de longitud por 1,40 de ancho.
Descendemos de la roca bajando por un terraplén que nos deja de nuevo en el camino. Las vistas comienzan a ampliarse, además de la Serrella y el Pla de la Casa ahora más nítidos, aparece la serra d’Alfaro. Pasamos por una desvencijada caseta de aperos.
El camino describe una cerrada curva para salvar una barranquera donde hay un esbelto ejemplar de pino de gran tamaño. El cauce del barranco ha sido abancalado aprovechando su desnivel y por el que vemos el valle.
Pasamos por delante de una finca para enseguida torcer a la izquierda por el asfaltado Camino de la Serreta que nos eleva con fuerza dándonos nuevas miradas al valle y a la serra d’Almudaina, en la loma los bancales de cerezos son con muretes de piedra seca.
Con desnivel más suave llegamos a las ruinas de un viejo corral. El camino serpentea al pasar por la valla de un terreno donde hay una bonita casa de madera con cuidados bancales de almendros y añejos olivos.
Poco más adelante tenemos un desvío por sendero a la derecha, marcado con una vieja paleta con “Creueta” que nos lleva entre bancales de almendros a subir un escalón entre pinos donde está situada la cruz, en el Tossal de la Creu (781 m.)
Según reza en la inscripción de su pedestal “La cruz levantada en este sitio en primeros del siglo XX para perpetuar el antiguo nombre de esta llometa a expresas de don Joaquín Martí Gadea presbítero escritor y escultor fue destrozada por un rayo el día 12 de junio del año 1921. Levantada y reconstruida por su sobrino Joaquín Martí Gadea artesano y labrador”.
Junto a la cruz, hay una bonita veleta metálica de casi su misma altura con una paloma torcaz recortada en chapa y posada sobre un artístico trabajo de forja con la letra inicial de los vientos que soplan por estas sierras.
Pese a su poca altitud el Tossal es un magnifico otero, es como una ventana abierta a la Vall de Seta con todo el esplendor de la Serrella y los pueblos cercanos. Desde arriba tenemos una buena vista sobre los tejados del recogido pueblo de Balones a nuestros pies.
Emprendemos el descenso de la loma por la derecha, por estrecho sendero en fuerte pendiente, primero entre terrazas de olivos y grandes panorámicas y luego amortiguando el desnivel hasta la parte alta del pueblo.
Entramos en Balones junto al depósito de aguas potables de 1950, por sus limpias y bien cuidadas callejuelas. Los restos más antiguos de poblamiento pertenecen a un hábitat de la Edad del Bronce en el Carrascalet. Sin embargo, los más interesantes son los íberos. Así, en el Collado del Zurdo se encontraron fragmentos de esculturas de cuadrúpedos.
Las esculturas se encuentran en el Museo de Prehistoria de València, y es conocida como Bicha de Balones. Además, se encontraron un plomo con escritura, un hacha de bronce, vestigios de murallas y un relieve que posiblemente representa a la divinidad Potnia Hippom o Epona.
Salimos del pueblo a la CV-720 que dejamos por la derecha, por un camino asfaltado entre bancales de almendros y olivos, algunos centenarios. Mirando hacia atrás vemos como Balones se queda bajo el Tossal de la Creu y la serra d’Almudaina.
Llegando a una enorme casona de dos plantas a la sombra de altos pinos, cambiamos de carril por la derecha, pasamos por una caseta que tiene un árbol de nísperos atestado de frutos. Vemos la torre de la iglesia de Gorga.
Vienen bancales de añosos olivos, ejemplares únicos de espectaculares troncos que mantienen bien cuidados. Gorga sigue emergiendo mientras conectamos de nuevo con la CV-720 y el puente que cruza el barranc del Cossí.
Antes de llegar al pueblo hay un pequeño mirador con bancos de cemento. A la entrada sigue sobreviviendo un ancestral almendro de tronco retorcido que recuerdo de otras veces. Con menos ramas pero sigue en pie.
Entramos en Gorga, antigua alquería musulmana del término de Travadell, de la que nada queda. Al igual que todos los pueblos de montaña está apacible, con sus limpias callejuelas y balcones adornados con macetas y flores. Cerramos esta amable ruta recorriendo algunos pueblos de la Vall de Seta.
RECORRIDO: CIRCULAR.
AGUA POTABLE EN RUTA: SI. (En las poblaciones y en la Font del Cosí)
DISTANCIA: 9,4 KM.
TIEMPO EN MOVIMIENTO: 03:30 HORAS.
ALTURA MÁXIMA: 781 M. (Tossal de la Creu)
ALTURA MÍNIMA: 547 M. (En Gorga)
DESNIVEL POSITIVO: 305 M.
DESNIVEL NEGATIVO: 311 M.
DIFICULTAD: MODERADA.