SIERRA DEL SERRAL, RUTA CIRCULAR

Posted by : Vaig a Peu sábado, 19 de abril de 2014

Sierra de considerable longitud, en la que destaca la existencia de numerosos cantiles, roquedos y peñascos. La existencia de roquedos proporciona interés paisajístico al conjunto, apareciendo en las solanas con formas más desgajadas y quebradas que en la umbría, donde la roca tiende a formar paredes más verticales. Bosque relativamente bien conservado con pinos de gran porte y matorral noble acompañante, sobre todo en la umbría, que conserva un pinar de Pinus halepensis que en algunas zonas es adulto, acompañado por matorral tipo maquia y alguna encina. Hay zonas de pino piñonero y repoblaciones forestales en las faldas. Solanas más deforestadas, cubiertas por un espartal – romeral sin arbolado o con pinar disperso. Vegetación rupícola de interés, con especies de flora asociadas a extraplomos. También se encuentran tomillares propios de laderas rocosas y flora de interés asociada a arenas. Entre las especies de fauna destacan varias aves de presa vinculadas al medio rupícola y forestal, por ser los más destacables de esta sierra. Numerosas especies de aves y mamíferos se encuentran por todo el monte. No existen en la actualidad manantiales ni fuentes de agua, por lo que los anfibios son muy escasos y sólo se encuentran en balsas de riego y acequias de riego modernas. La Sierra cuenta con topónimos de gran valor etnográfico, como el Barranco del Tesoro, cuyo origen se desconoce. Algunos aluden a fauna diversa como el Barranco del Búho, Barranco del Paire (se refiere al gorrión chillón Petronia petronia), Collado de la Peña de la Cabra... o a acontecimientos históricos ya caídos en el olvido (Senda de los Carlistas, Collado de los Sargentos). En un lugar escondido hay una sugerente inscripción, que siempre tiene flores: “Monte Elia”...

CÓMO LLEGAR: Por la CV-84 hacia Aspe, La Romana, La Romaneta, para conectar con la CV-83 hasta Pinoso. En la 2ª rotonda tomar dirección Yecla por la CV-836, que luego es la C-3314. En el kilómetro 10 de esta carretera, después de pasar por la derecha el cruce hacia Villena, viene una curva cerrada a la izquierda, estar atentos porque después de la curva, por la izquierda, hay que tomar un estrecho camino asfaltado, que en 2 km termina en una pista de tierra. A unos 100 m. por la izquierda tenemos el panel y balizas del inicio de la ruta. Hay sitio para aparcar.

ITINERARIO: CAÑADA DE LOS SERRANOS / COLLADO DEL PORTICHUELO / CAMINO HOYA DEL MOLLIDAR / BALSA DE RIEGO / BARRANCO DEL BÚHO / BARRANCO DEL TESORO / ENLACE CON PR-MU 90 /CASAS DEL PUNTAL ALTO / BOQUERA DEL CARCHE / CAMINO DE LA UMBRÍA / CAÑADA DE LOS SERRANOS.

COMPONENTES: VICENTE.

LA RUTA: Segunda ruta por tierras murcianas pero en la parte opuesta a la de ayer. Esta vez en el término municipal de Yecla muy cerca de Pinoso. La Sierra del Serral es de notable longitud lineal y forma un pequeño y estrecho valle entre la Sierra de Salinas: la Hoya del Mollidar. La intención era recorrer su cresta pero al quedarme solo he preferido rodearla, usando dos PR-MU 90 y 90.1, uniéndolos con los senderos no balizados del Barranco del Búho y el Barranco del Tesoro.

Inicio desde el panel descriptivo de los dos PR’s, por la izquierda, con la Cañada Real de los Serrano en dirección a la torre eléctrica cerca del Collado del Portichuelo. Una vez arriba se me ponen los dientes largos mirando la estrecha y afilada cresta, pero lo dejo para otra ocasión que venga acompañado.

El camino desciende y tengo una primera panorámica de la cadena montañosa, es como una muralla natural e infranqueable. Enfrente la cercana Sierra de Salinas marca los límites del angosto valle poblado de numerosas casas de campo y bancales en producción.

Llegamos a un poste balizado donde dejamos el camino de la Cañada Real de los Serrano y por la derecha continuamos por una pista asfaltada, el Camino de la Solana del Mollidar. A partir de ahora nos acompañará por la izquierda una acequia prefabricada que abastece de agua a todo el valle.

En un principio, debido al asfalto y el terreno llano en que discurre este largo recorrido, pensé que sería muy monótono, pero la cambiante visión de la montaña, con sus múltiples farallones a medida que voy avanzando entre bancales de almendros con sus frutos ya cuajados, amenizan el trayecto.

Los bancales cambian a olivos, y luego a un escueto pinar al llegar a la parte central de la montaña, donde se encuentra el punto más elevado de la sierra, el Serral (954 m.), del que distingo una cruz en todo lo alto de los riscos. Por el otro lado vienen bancales de cuidadas viñas que presagian de buenos caldos.

Alcanzo una zona ajardinada con bancos junto a una enorme balsa de riego, pero está cerrada con una barrera. No entiendo quien pueda disfrutarla, de estar abierta sería un aliciente para la ruta. De nuevo esmerados bancales de almendros jóvenes llegan casi a la sierra.

Un pequeño desnivel de bajada y unas curvas del camino para rodear una loma rompen la simpleza del itinerario. La vaguada que hace la loma ha sido aprovechada para roturar bancales que han sembrado de trigo. El camino se ciñe más a la sierra.

Viene por la izquierda un complejo distribuidor de aguas de la acequia que nos acompaña. Enfrente unas casas de campo con algunos bancales y poco más adelante, un poste de madera balizado con paletas que indican la dirección del Barranco del Búho. Aquí termina el recorrido balizado de unos siete km del PR-MU 90.1.

Un descuidado camino de tierra me dirige hacia la sierra entre bancales pedregosos, pero cuidados, con plantones de almendros. El camino termina en un bancal labrado, sigo la ruta del GPS hasta que en un margen a la izquierda, unos mojones marcan el inicio de una senda. Quizás la propiedad privada impida marcar esta vereda.

Por fin, el ambiente es asilvestrado y montañero. El entorno de la sierra se torna agreste, rocoso, y el sendero serpentea ascendiendo por la ladera. Enseguida tenemos vistas elevadas entre los pinos, con el final del valle y la Sierra de Salinas al fondo.

En el encajonado cauce del pequeño Barranco del Búho, se prodiga la vegetación, hay grandes pinos, sabinas y profuso matorral bajo que no impiden la suave y extensa subida, hace unas curvas y en un último esfuerzo culmino la loma del Alto de las Losas (852 m.).

Tengo una visión diferente del cordal de la sierra y en el otro lado, la del Carche. Para el tramo que viene ahora, si no se conoce el terreno, es imprescindible el GPS. Es un recorrido por toda la loma buscando la mejor bajada. Está marcada con mojones, quizás algo separados, pero el esparto y el intenso matorral bajo impiden otearlos. Para mí, ha sido una bonita lección de orientación con GPS.

La bajada culmina por el Barranco del Tesoro, también entre pedregosos bancales de almendros. Poco después tenemos la primera (la última), depende de cómo se mire, baliza en un poste de madera, del PR-MU 90 Umbría del Serral. A la sombra de unos pinos decido tomar mi almuerzo.

Repuesto de líquidos y energía, ahora, eso sí, por caminos de herradura, voy dejando atrás bancales de descuidados almendros, para luego llegar a las minadas cepas de viña, se nota que estamos en zona vinícola, y algunos campos de olivos.

Arribo a las Casas del Puntal Alto, donde un poste con paletas informativas nos cambia la dirección de la marcha hacia el cruce con la Boquera del Carche, acercándonos a la sierra de nuevo. Tenemos una impresionante vista de la Sierra del Buey en Jumilla, y una última mirada a la Sierra del Carche.

El trazado sigue rodeando esta extensa sierra para situarnos de nuevo en paralelo a ella, y comenzar a entrar en la umbría de su cara norte. Dejamos atrás campos de secano con olivos entrados en años; vemos las recortadas y puntiagudas crestas donde la vegetación y los pinos llegan a las cotas más altas.

Al llegar a la Boquera del Carche, el paisaje y el terrero cambian durante un tramo, el suelo se vuelve arenoso y tengo la sensación de caminar por las arenas de un desierto. El pino piñonero se adapta bien a estos terrenos pero escasea el matorral bajo, siendo autóctono y de especies amenazadas.

Desde la Boquera y una vez superado este tramo, la pista de tierra entra en la Umbría del Serral, paralela y pegada a la sierra con abundante y espesa vegetación de pinos que me impide ver los contornos de la sierra o las panorámicas del ancho valle hasta Yecla.

Son unos siete kilómetros con varias entradas por nuestra izquierda, de caminos que van a fincas o casas de campo, con alguna pequeña cueva y extenso pinar hasta que conecto de nuevo con la Cañada Real de los Serranos donde está el coche. Califico la ruta de moderada por la distancia recorrida, que permite conocer los parajes de esta bonita sierra. Solo nos queda patear sus afiladas crestas.