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- EL CARCHE DESDE VIÑA "P"
Posted by : Vaig a Peu
sábado, 30 de noviembre de 2013
En el Altiplano
murciano sus extensas planicies nos presagian la proximidad de las llanuras
manchegas. Flanqueado por escarpadas montañas, sus anchos valles están
atravesados por una infinita red de ramblas. Es la comarca del noroeste, uno de los espacios más singulares
de la región. Compuesta por los municipios de Fortuna, Abanilla, Jumilla y
Yecla, se trata de poblaciones con intensa raigambre e historia, donde nos
encontramos con campos cubiertos de viñedos y donde también podemos disfrutar
del carrascal en el Valle de Guarafía y el pino laricio en la Sierra del
Carche; olmos en la rambla de Tobarrillas; pinares en la Sierra Larga y Serra
del Serral; lentisco en Jumilla (Monte de Sana Ana y Serral) y en Yecla (Sierra
de Salinas y Monte Arabí); quejigo y pinares en la Sierra de Salinas. Jumilla
con 972 km2, ocupa el segundo lugar en extensión entre el conjunto de
municipios de la región. Situado al noroeste de la Comunidad Autónoma de Murcia,
su privilegiada situación geográfica es de transición y nudo de comunicaciones
entre Murcia, La Mancha, Andalucía y Levante. El poblado de Coímbra en el
Barranco Ancho se puede considerar como el primer núcleo urbano de la comarca
que fue destruido de forma violenta a principios del siglo II a.C. Con la
llegada de los romanos aparecieron las villas que tan abundantes son en la
comarca y que tan ricos restos materiales nos han legado, como los mosaicos
pertenecientes a la Villa de los Cipreses, del siglo IV d.C., que se pueden
contemplar en el Museo Municipal Jerónimo Molina. De época romana son El Casón,
monumento paleocristiano del siglo V, que es uno de los pocos que quedan bien
conservados en la Península Ibérica, y el dios “Hipnos”, estatua de bronce
encontrada cerca de El Casón, y en la actualidad en el Museo Nacional de Berlín.
De la dominación árabe nos han quedado copiosas huellas pudiendo destacar El
Castillo como yacimiento más importante, ya que la ubicación de un núcleo
estable de población en el cerro de El Castillo, dará origen al asentamiento
definitivo de la Ciudad. Las características actuales del paisaje vegetal de
Jumilla son el resultado de los cambios introducidos a lo largo de la historia
por las comunidades humanas que han habitado en la zona en los últimos
milenios.
CÓMO LLEGAR: Salida en
dirección a Aspe por la CV-84, sin entrar en la población seguir por la CV-846
a La Romana, en la rotonda continuar por la CV-834 hasta conectar con la CV-83
hasta Pinoso. Tomar dirección Jumilla por la RM-427 y a los 7 km en una curva
está la Venta Viña “P”, seguir por la pista de tierra durante 2,3 km, poco
después de las Casas de la Curiosa, en los restos de una pequeña cantera donde cruza el Barranco de la Mina y bajo unos
pinos, podemos aparcar.
ITINERARIO: BARRANCO DE
LA MINA / CASAS DEL CANTAL / CASA CHAMORRO / ATAJO / HOYA DE LAS GRAJAS / ATAJO
/ LA MADAMA DEL CARCHE / SENDA DEL CORDAL / COLLADO DEL POZO DE NIEVE / CASA
CHAMORRO / CASAS DEL CANTAL / SENDA DEL CRESTÓN DEL CAÑAL / CAMINO DEL COLLADO
DE LAS COLMENAS / BARRANCO DE LA MINA.
LA RUTA: Con motivo del
partido de fútbol del Elche a primera hora de esta tarde, hemos tenido que recurrir
a una ruta cercana, y la elegida ha sido El Carche, pero por Viña “P”, por
donde hacía más de tres años que no subíamos. La sorpresa ha sido ver que han
rehabilitado y reabierto la Venta Viña “P”.
Esta es una ruta sencilla y fácil, aunque tenemos que superar un desnivel de 700 metros, transcurre toda por la pista forestal; nosotros tomaremos varios atajos para romper la monotonía y al final del recorrido habremos hecho tres círculos unidos por el camino principal.
Hace una mañana fría y ventosa, esperemos que el sol se mantenga y la alivie un poco. El macizo de esta sierra forma una especie de “U” con dos brazos montañosos, separados por los cauces de los barrancos de la Madama y de la Mina que se unen en la abertura.
Comenzamos a subir por el brazo de la derecha donde la pista forestal culebrea y nos eleva con facilidad en medio de un gran bosque de pinos. Enfrente, en el otro brazo, que es donde están las cotas más altas, el sol, comienza a iluminarlas.
Vamos superando curvas y rampas con alguna visión a la llanura del Altiplano, interrumpida por La Pila en las cercanías de Fortuna. Al tomar altura, enfrente ya divisamos el punto geodésico de la Madama, la parte superior del refugio de madera y las antenas de telefonía, todo ello iluminado por el sol.
Seguimos caminando por la umbría. Hemos dejado atrás las revueltas y comienza una larga recta con un moderado nivel de inclinación, que en su culminación se encuentran las Casas del Cantal, casas de labor actualmente en ruinas con sus campos de cultivo en abandono.
Por la derecha tenemos un largo muro en piedra seca con un gran bancal de almendros, al final del mismo llegamos a un cruce de caminos. Hay un grueso monolito cuadrado con un mapa de la zona en azulejos, y las indicaciones del camino al paraje de la Yedra, Raspay y Casas de Ibáñez.
Nosotros seguimos las indicaciones al Alto del Carche pero enseguida nos desviamos a la izquierda por detrás de la Casa Chamorro y su enorme pino. La estrecha senda es un atajo que nos sitúa en la Hoya de las Grajas y enlaza de nuevo con la pista. Tenemos una bonita mirada a la sierra de la Pila con sus dos emblemáticas cumbres.
La pista hace un recodo a la derecha pasando por un cartel que indica la Sima de los Cachorros. Hace unos años hicimos una pequeña batida pero no logramos encontrarla. Un poco más adelante volvemos a salirnos de la pista por la izquierda. Marcada con mojones se inicia una empinada senda que tomándola con pausa nos ataja unos kilómetros de pista.
Conectamos de nuevo con la pista muy cerca de una antigua rampa para parapente. Las vistas que hoy tenemos son borrosas, las nubes se desgajan y enturbian el horizonte. Sigue haciendo frío.
Estamos muy cerca de la cumbre y comenzamos a subir los peldaños de piedra en dirección al singular refugio de madera en forma de “V” invertida. Solo recuerdo otro de parecido diseño aunque algo mayor, en la Font dels Teixos de l’Aixortá. El viento arrecia y el pequeño generador en forma de avión con hélice, trabaja a destajo.
La Madama del Carche (1.371 m.) Tenemos que ajustarnos los cortavientos para hacernos la foto. En la otra vertiente las Salinas de la Rosa destacan en el paisaje. Optamos por comer dentro del refugio con la puerta abierta para que entre un poco el tibio sol. A medio almuerzo llega un grupo de cinco que son de Yecla, y después tres más que se unen a la cháchara montañera.
Volvemos a abrigarnos para iniciar el descenso. Lo hacemos por la senda del cordal que nos deja en el Collado del Pozo de Nieve. Nos hacemos una foto con la gente de Yecla y nos despedimos. Ellos bajarán por el barranco de la Yedra.
Nos dejamos llevar por la pista forestal. Pasamos cerca de la Casa de Chamorro y su pino, y llegamos al cruce de caminos. Con el del Raspay conectará la gente de Yecla al salir del barranco. Poco después arribamos a las Casas del Cantal.
Cuando comienzan las eses y curvas, prestamos más atención porque en la segunda y más cerrada, que está marcada con mojones, dejaremos la pista por la izquierda, para continuar por una preciosa senda entre el bosque de pinos que nos guiará hasta una brecha en el Crestón del Cañal.
Por la brecha accederemos a la otra vertiente. La senda nos desciende primero entre pinos y luego entre matas de esparto hasta enlazar con el Camino del Collado de las Colmenas. Proseguimos por la derecha.
Con esta nueva pista nos paseamos bajo los bonitos crestones del Cañal por una preciosa ladera pajiza de esparto y salpicada de pinar. Es un trayecto breve porque enseguida llegamos al Barranco de la Mina y a nuestro coche, con todos los objetivos cumplidos.
Esta es una ruta sencilla y fácil, aunque tenemos que superar un desnivel de 700 metros, transcurre toda por la pista forestal; nosotros tomaremos varios atajos para romper la monotonía y al final del recorrido habremos hecho tres círculos unidos por el camino principal.
Hace una mañana fría y ventosa, esperemos que el sol se mantenga y la alivie un poco. El macizo de esta sierra forma una especie de “U” con dos brazos montañosos, separados por los cauces de los barrancos de la Madama y de la Mina que se unen en la abertura.
Comenzamos a subir por el brazo de la derecha donde la pista forestal culebrea y nos eleva con facilidad en medio de un gran bosque de pinos. Enfrente, en el otro brazo, que es donde están las cotas más altas, el sol, comienza a iluminarlas.
Vamos superando curvas y rampas con alguna visión a la llanura del Altiplano, interrumpida por La Pila en las cercanías de Fortuna. Al tomar altura, enfrente ya divisamos el punto geodésico de la Madama, la parte superior del refugio de madera y las antenas de telefonía, todo ello iluminado por el sol.
Seguimos caminando por la umbría. Hemos dejado atrás las revueltas y comienza una larga recta con un moderado nivel de inclinación, que en su culminación se encuentran las Casas del Cantal, casas de labor actualmente en ruinas con sus campos de cultivo en abandono.
Por la derecha tenemos un largo muro en piedra seca con un gran bancal de almendros, al final del mismo llegamos a un cruce de caminos. Hay un grueso monolito cuadrado con un mapa de la zona en azulejos, y las indicaciones del camino al paraje de la Yedra, Raspay y Casas de Ibáñez.
Nosotros seguimos las indicaciones al Alto del Carche pero enseguida nos desviamos a la izquierda por detrás de la Casa Chamorro y su enorme pino. La estrecha senda es un atajo que nos sitúa en la Hoya de las Grajas y enlaza de nuevo con la pista. Tenemos una bonita mirada a la sierra de la Pila con sus dos emblemáticas cumbres.
La pista hace un recodo a la derecha pasando por un cartel que indica la Sima de los Cachorros. Hace unos años hicimos una pequeña batida pero no logramos encontrarla. Un poco más adelante volvemos a salirnos de la pista por la izquierda. Marcada con mojones se inicia una empinada senda que tomándola con pausa nos ataja unos kilómetros de pista.
Conectamos de nuevo con la pista muy cerca de una antigua rampa para parapente. Las vistas que hoy tenemos son borrosas, las nubes se desgajan y enturbian el horizonte. Sigue haciendo frío.
Estamos muy cerca de la cumbre y comenzamos a subir los peldaños de piedra en dirección al singular refugio de madera en forma de “V” invertida. Solo recuerdo otro de parecido diseño aunque algo mayor, en la Font dels Teixos de l’Aixortá. El viento arrecia y el pequeño generador en forma de avión con hélice, trabaja a destajo.
La Madama del Carche (1.371 m.) Tenemos que ajustarnos los cortavientos para hacernos la foto. En la otra vertiente las Salinas de la Rosa destacan en el paisaje. Optamos por comer dentro del refugio con la puerta abierta para que entre un poco el tibio sol. A medio almuerzo llega un grupo de cinco que son de Yecla, y después tres más que se unen a la cháchara montañera.
Volvemos a abrigarnos para iniciar el descenso. Lo hacemos por la senda del cordal que nos deja en el Collado del Pozo de Nieve. Nos hacemos una foto con la gente de Yecla y nos despedimos. Ellos bajarán por el barranco de la Yedra.
Nos dejamos llevar por la pista forestal. Pasamos cerca de la Casa de Chamorro y su pino, y llegamos al cruce de caminos. Con el del Raspay conectará la gente de Yecla al salir del barranco. Poco después arribamos a las Casas del Cantal.
Cuando comienzan las eses y curvas, prestamos más atención porque en la segunda y más cerrada, que está marcada con mojones, dejaremos la pista por la izquierda, para continuar por una preciosa senda entre el bosque de pinos que nos guiará hasta una brecha en el Crestón del Cañal.
Por la brecha accederemos a la otra vertiente. La senda nos desciende primero entre pinos y luego entre matas de esparto hasta enlazar con el Camino del Collado de las Colmenas. Proseguimos por la derecha.
Con esta nueva pista nos paseamos bajo los bonitos crestones del Cañal por una preciosa ladera pajiza de esparto y salpicada de pinar. Es un trayecto breve porque enseguida llegamos al Barranco de la Mina y a nuestro coche, con todos los objetivos cumplidos.
AGUA EN RUTA: NO.
DISTANCIA: 16 KM.
TIEMPO: 03:40 HORAS.
ALTURA MÁXIMA: 1.371 M.
(La Madama del Carche)
ALTURA MÍNIMA: 737 M.
(Barranco de la Mina)
DESNIVEL POSITIVO: 694 M.
DESNIVEL NEGATIVO: 690 M.
DIFICULTAD: MODERADA.