2ª JORNADA
ITINERARIO:
CAMPING DE ZURIZA / RÍO VERAL / BARRANCO DE PETRAFICHA / TAXERAS / ACHAR
D’ALANO / SENDA DE LA IZQUIERDA /ACHAR DE FORCA / PEÑAFORCA / BARRANCO DE LA
RECLUSA / SENDA DE CAMILLE / TRAMO ERRÓNEO / COLLADO BAIXO DE LENITO / BARRANCO
DE LENITO / CRUCE CARRETERA SELVA DE OZA CON EL RÍO ARAGÓN SUBORDÁN / FUENTE DE
BALANDIN / REFUGIO DE GABARDITO.
COMPONENTES:
VICENTE, JULIÁN, LOURDES, PATRO, CHÚS, NIEVES Y JAVIER
LA RUTA: Ayer
después de la cena nos acostamos temprano y a las 06:30 horas estamos en pie.
Abundante desayuno, botas y mochila en ristre preparada. También decidimos
iniciar desde el Camping de Zuriza con lo cual quitamos cinco kilómetros de
asfalto y una hora de recorrido; para ello dejamos mi coche en Linza y los otros
dos en el Camping. Esta ruta la hice en la Senda de Camille e invertimos 08:30
horas; le restamos una hora pero hay que sumarle la subida a Peñaforca, la cual
me genera dudas porque no tenemos ninguna referencia del ascenso por este lado.
Partimos por la
ancha pista de tierra frente al Camping, teniendo a nuestra derecha el curso
del río Veral y en dirección al Barranco de Petraficha. Vamos por umbría. Hace
una mañana fresquita pero promete un día espléndido como el de ayer.
El camino nos
desciende suavemente para entrar en la cabecera del valle de Taxeras; el sol
alumbra toda la barrera de la Sierra d’Alano con todos sus picos y agujas
alineados en forma de pétrea muralla infranqueable.
Al llegar a un redil
de ovejas, un poste con paletas nos indica la dirección del Achar; cruzamos el
río Veral por un puente de tubos y en la otra vertiente, por la izquierda,
comenzamos a subir por una empinada senda.
La senda evita y
cruza varias veces la carretera asfaltada, loma tras loma nos vamos elevando teniendo
como única visión la barrera montañosa. La carretera termina junto a una gran
nave ganadera, desde donde tenemos una buena panorámica del Achar d’Alano, única
puerta natural o gran brecha para atravesar esta agreste muralla.
Reanudamos el
ascenso por una herbosa loma, hemos de superar un fuerte desnivel de unos 400
m. en muy corto recorrido. Hay varios surcos de sendas pero todas se dirigen
más o menos al mismo lugar, pared derecha del Achar donde enlazamos con la
senda del canchal.
El trazado de
enormes piedras y bloques nos da una tregua, y en varias zetas nos sigue
elevando para dirigirnos luego a la pared de la izquierda, donde entramos en un
estrecho y vertical corredor pegado a las paredes hasta cruzar la brecha. Achar
d’Alano (1.900 m.). La vista hacia
abajo es preciosa, el pedregal del embudo se abre al valle.
Tomamos un respiro
aliñado con barritas energéticas y geles. Proseguimos la marcha pero a unos
cientos de metros, en una bifurcación,
el grupo se divide. Por la izquierda Julián, Lourdes, Patro y yo nos
vamos en pos del Peñaforca; por la derecha Chús, Nieves y Javier seguirán el
itinerario de la Senda de Camille hasta el Refugio de Gabardito, donde nos
reuniremos todos.
Nos elevamos
suavemente remontando herbosas lomas por la estrecha senda que nos va situando
en la cabecera de un barranco cercano al Collado del Rincón. Consultamos con
dos personas que vienen en sentido contrario y nos indican que la mejor forma de
afrontar la cima es cruzando el achar y por la otra vertiente, sin cumbrear,
pero no perdiendo altura, podemos llegar.
Entramos en una zona
más estrecha y cerrada entre las laderas del Peñaforca y la Punta del Ricón
d’Alano. El paisaje se torna pétreo y solitario; nos desviamos a la derecha
siguiendo unos hitos que nos encaminan hacia nuestro destino que es una
formidable barrera montañosa.
Entre grandes rocas
y evitando neveros alcanzamos la ladera. La senda del canchal es más estable y
en diagonal nos conduce hasta una especie de collado junto a un gran cabezo
rocoso. Un montañero más joven que nosotros se nos une en el collado.
En la otra vertiente
bajamos un poco para poder rodear esta gran mole rocosa. Poco después el
montañero sube, continua cresteando y lo perdemos de vista.
Los hitos nos hacen
bajar un poco para rebasar un farallón escabroso que al dar la vuelta termina
en una gran losa inclinada. Esto frena un poco al grupo, así que, me adelanto y
la cruzo, e indago unos cuarenta metros adelante. Veo gente en la cumbre que
debe de estar a unos ciento cincuenta metros en línea recta y un desnivel de
unos veinticinco metros; pero a unos quince metros hay otro enclave rocoso en
el que habrá que poner las manos y nos sé si algo más. Regreso con el grupo y
surgen las dudas. Ha sido un error iniciar este ascenso sin datos.
Decidimos abortar la
subida. Estamos a 2.370 m. y la cumbre tiene 20 m. más. Nos hacemos la foto de
rigor y viene el dilema: la bajada. Retroceder o por esta vertiente, descender
a otro nivel y ver si es factible transitar por la ladera, y como último
recurso bajar por el barranco un desnivel de más de 1.000 m.
Descendemos a un
primer nivel y en una herbosa loma paramos a comer. Luego consultamos los mapas
y visualmente buscamos hitos o rastros de senda que nos permitan abordar la
ladera pero no son visibles y decidimos afrontar el barranco. Buscamos el mejor
acceso y empieza la gran bajada.
Salvamos algunos
escollos pero comienza a hacerse interminable. El camino que vemos al fondo y
que nos sirve de referencia, siempre está a la misma distancia. El barranco se
estrecha y llegamos a la vegetación e imaginamos la cercanía del camino pero la
ladera se hace eterna. Salimos del cauce por la izquierda y entramos en un
sector arbolado con algunas hayas y por fin, una marca y la Senda de Camille.
Estamos tan ofuscados que no nos paramos a pensar, y seguimos bajando más de un
kilómetro hasta el camino, cuando en realidad era en sentido contrario y
comenzar a subir.
Perdemos mucho
tiempo razonando y mirando mapas. En el camino al ver un poste con la
indicación de Lenito, yo, lo tengo claro porque lo recuerdo de la Senda de
Camille, hay que volver por la senda y ascender hasta el Collau de Lenito Baxo.
Volvemos a patear la
senda y comienza un bonito ascenso entre el inmenso y tupido bosque de hayas
jóvenes que forma la Selva de lo Furno y que cubre toda la exigente loma. Entre
grandes lazadas y acentuadas rampas que requieren nuestro máximo esfuerzo logramos
culminar el Collau de Lenito Baxo (1.716 m.).
Si hubiésemos
logrado hacer cumbre, posiblemente desde ella, habríamos accedido a este
collado evitando la gran bajada por el barranco y también esta dura subida.
Pero la realidad es la que es. La tarde va cayendo y nos queda un fuerte y
largo recorrido hasta el refugio. Tenemos que bajar hasta la carretera de la
Selva de Oza y luego remontar hasta Gabardito.
Al principio la
bajada es suave pero se endurece pasada la Borda de Chiburro, inclinándose aún
más en un camino pedregoso. Alcanzada la carretera cruzamos el puente sobre el
río Aragón Subordán y comienza la fuerte subida hasta el refugio. Con
interminables zigzags cruzamos varias veces la carretera y repostamos agua en
la Fuente de Balandin, para llegar casi derrotados y fuera del horario de cena al refugio. Aquí fueron indulgentes, y nos sirvieron cena, pero tenía que ser antes de
ducharnos.
RECORRIDO:
LINEAL.
AGUA EN RUTA:
SI (Fuente de Balandín)
DISTANCIA:
27,4 KM.
TIEMPO: 13:00
HORAS
ALTURA MÁXIMA:
2.391 M. (Peñaforca)
ALTURA MÍNIMA:
905 M. (Puente sobre el Río Aragón Subordán)
DESNIVEL
POSITIVO: 2.150 M.
DESNIVEL
NEGATIVO: 2.040 M.
DIFICULTAD: DIFÍCIL.
LA RUTA: Ayer
después de la cena nos acostamos temprano y a las 06:30 horas estamos en pie.
Abundante desayuno, botas y mochila en ristre preparada. También decidimos
iniciar desde el Camping de Zuriza con lo cual quitamos cinco kilómetros de
asfalto y una hora de recorrido; para ello dejamos mi coche en Linza y los otros
dos en el Camping. Esta ruta la hice en la Senda de Camille e invertimos 08:30
horas; le restamos una hora pero hay que sumarle la subida a Peñaforca, la cual
me genera dudas porque no tenemos ninguna referencia del ascenso por este lado.
