PLA DE LA CASA / MALLADA DEL LLOP / BARRANC DE LA CANAL

Posted by : Vaig a Peu sábado, 11 de febrero de 2012

RUTA: FAGECA / BARRANC DEL MORO / PLA DE LA CASA / PLA DEL MANCO / LES COVATELLES / MALLADA DEL LLOP / BARRANC DE LA CANAL / CAMI DE LA RABOSA / FAMORCA / FAGECA.

COMPONENTES: VICENTE, JULIÁN Y PATRO.

ITINERARIO: Autovía hacia Valencia, salida en la rotonda elevada San Vicente/Alcoy. En Alcoy pasados los túneles, rotonda dirección hasta Benilloba, dirección Castells de Castells, pasar Balones, Benimassot, Tollos y llegar a Fageca. Aparcar un poco antes de entrar en el pueblo, pequeño espacio a la derecha junto a los contenedores de cartón y plástico.

Los pueblos de Fageca (773 m.) y Famorca (680 m.) son municipios de la Comunidad Valenciana, situados al norte de la provincia de Alicante en la comarca del Comtat, se encuentran enclavados en el Valle de Seta entre las montañas de La Serrella y Alfaro. La Sierra de la Serrella se extiende sobre los términos de Beniardá, Confrides, Castells de Castells, Benasau, Cuatretondeta, Fageca y Famorca durante una longitud aproximada de 15 km. Su posición Este-Oeste con una naturaleza accidentada hace una barrera intercomarcal teniendo por el sur a la Marina Baixa y por el norte al Comtat de Cocentaina y la Marina Alta. Hacia el Este la sierra continua pero bajo la denominación de La Aixortá, pues verdaderamente no podemos hablar de una discontinuidad entre ambas montañas. En ella podemos encontrar cuatro picos que superan los 1.300 metros: La Serrella o Recingle Alt (1.359 m.), la Peña l’Heura (1.351 m.), Pla de la Casa (1.387 m.) y Mallada del Llop (1.360 m.).

Apenas hay 2º C y el ambiente es fresco, el cielo está despejado pero corre una ligera brisa. La imagen de la sierra es con nieve en las umbrías, más de la que esperábamos. Iniciamos por el pequeño pasadizo subterráneo que nos cruza la carretera para salir al lavadero y Font de Espirit Sant.

Llegamos al cruce de caminos, por la izquierda continua el PR CV-168 que pasa por Famorca y que utilizaremos al regreso. Nosotros continuamos recto, hacia el Barranc del Moro, entre bancales de de almendros con las yemas a punto de brotar y que parecen contener el aliento esperando que pasen estos fríos.

Vamos por el camino en ascenso hasta que a la entrada del barranco entre bancales que en esta zona están en abandono se convierte en senda, con la estampa final de la sierra salpicada de motas blancas.

Al principio el cauce es estrecho y vamos ganando altura por medio de cortas rampas, hasta cruzar a la ladera de la izquierda para abrirse cuando llegamos a las inmediaciones de la montaña. El pueblo va quedando atrás y solo vemos su depósito de agua en las faldas de la Serra de Alfaro.

En el suelo hay rastros de nieve, pero en las pequeñas rampas cuando lluvias y deshielos el agua las utiliza para deslizarse se ha congelado, y en tramos de más de un metro tenemos de salirnos de la senda para evitar resbalones.

Vemos enfrente, en la otra ladera, la Cova de Bernat utilizada como refugio para el ganado. Estamos llegando a la Font del Cuquero, el barranco se vuelve a cerrar un poco entre las piedras de antiguos desprendimientos por donde desagua la fuente en diminutas cascadas y que ahora están congeladas formando un bloque de hielo.

De la goma con grifo que hay frente a la caseta no surte agua, también está congelada. Con cuidado avanzamos por la derecha bajo el farallón de la montaña para seguir ascendiendo hacia el collado.

Este tramo de subida es más inclinado y no tiene rampas, por lo que el agua utiliza la senda como canal de desagüe y está totalmente congelada hecha un bloque blanquecino de más de cincuenta centímetros por varios metros serpenteantes. Esta mañana hemos desechado subir los crampones pero tampoco hay mayor problema, basta con caminar pisando las zarzas de alrededor.

Con mucho esfuerzo seguimos avanzando, el valle se ensancha y entramos en la solana, con lo cual va desapareciendo el hielo. A la derecha entre las paredes se distingue la pétrea ventana cuadrada y a la izquierda, con nieve en la umbría les Penyes del Collado por dónde iremos más tarde a la Mallada del Llop.

Poco antes de llegar a la unión de sendas, un gran mojón de piedras nos indica un pequeño atajo para los que venimos por esta parte y en unos minutos conectamos con la senda de subida a la cumbre.

Primero fácil hasta llegar al gran dedo de piedra a mitad de ascenso, luego la senda es pedrera. Nos vamos por la derecha huyendo de la umbría por si hay hielo y después de varias rampas estamos en el llano donde se ubica el pozo de nieve.

Comenzamos la subida a la cima, es todo umbría y roca, por lo que extremamos nuestro cuidado. Hace unas semanas cayó una mujer al vacío, venía con un grupo de unas veinte personas, no sé cuantas habría en el pequeño montículo pero son demasiadas. Tuvo suerte y quedó entre unas carrascas.

Cima del Pla de la Casa (1.387 m.) diría que estamos en el centro de la zona montañosa de Alicante, de norte a sur el Benicadell, Montcabrer, la Serrella, Aitana, el Puig, Bernia, Aixortá, Mallada del Llop… Hasta ahora he creído que el nombre hacía alusión al llano de la caza, pero revisando notas y así es, puesto que estamos sobre sus ruinas, se debe a una antigua torre o casa que existió en este lugar.

Siempre me ha gustado hacerme fotos apoyado en la cruz del vértice, sin embargo Patro parece que se la quiera llevar a su casa, estos descreídos.

Coronada la primera cumbre iniciamos el regreso al collado con más cuidado que en la subida y la vista del Pou de Neu a nuestros pies.

Una vez en el collado seguimos por la senda de la izquierda, hacia la loma de les Penyes del Collado moteada de blanco y que cruzamos por completo para ir bajando poco a poco a media altura sin llegar al fondo del barranco.

Tenemos una bonita visión del barranco con Fageca en la loma de la sierra de Alfaro y al fondo el pueblo de Tollos. Aquí el aire se nota más y volvemos a abrigarnos.

Enlazamos con la siguiente loma para luego hacerlo con la senda de la pedrera, cerca de una gran carrasca, hay mojones. Esta senda es una pasada, vamos por la solana elevándonos suavemente en diagonal y paralelos a la sierra de Aitana.

Una vez en la cuerda de la sierra seguimos ascendiendo por la cresta, ampliándose nuestras vistas, al fondo vemos la senda que otras veces hemos pateado viniendo de Famorca y en la última elevación tenemos el punto geodésico.

Mallada del Llop (1.360 m.), aunque hay un poco de bruma, hacia el mar es un espectáculo, el Pantano de Guadalest, la Aixorta, el Morro Blau y asomándose por detrás el Bernia.

Almorzamos al sol junto a las rocas debajo del vértice, todavía queda un pequeño nevero congelado, que con el vino del agüelo ni se nota, buen bizcocho de Mari.

Nos ponemos de nuevo en marcha y al salir al descubierto el aire pega y tenemos que abrigarnos. Esta parte de la ruta es nueva para Patro. Bajamos de frente un poco para crestear por la siguiente loma. A la izquierda, a nuestros pies, se abre en descenso el Barranc de la Canal, con sus hermosas paredes verticales enfrente salpicadas de hiedras.

Pasamos a la siguiente loma para comenzar a descender paulatinamente hasta el fondo del barranco, Julián se sale de senda y lo hace más entretenido, seguimos en la umbría y el fresco se nota. La cadena montañosa de la izquierda es impresionante, parece que continúe hasta el infinito. Al otro lado, el collado parece situarse en la cresta de una gran ola.

Llegamos al pequeño pozo de nieve en la umbría, para seguir descendiendo hasta el cauce del barranco, donde nos cruzamos con la senda que viene desde lo alto del collado. A nosotros nos gusta bajar desde las paredes por la grandiosidad de las vistas.

Ahora solo tenemos que dejarnos llevar por la senda que en un momento dado se pega a la ladera de la izquierda, hemos que estar atentos, ver mojones, porque nosotros debemos ascender por esa ladera para salir del barranco. De seguir por el mismo, enlazaríamos con el PR CV-19 que va al Castellet y a la Aixortá.

Arriba en las paredes el paisaje cambia por completo, pierde su grandiosidad y al fondo vemos Castells de Castells. Esta senda es nueva para todos, hemos de ir por la izquierda a media altura pegados a la ladera.

La senda está pateada y muy visible, con nieve en algunos tramos. Mirando hacia atrás tenemos una vista lateral del otro lado de la Aixortá y por delante esporádicos pinos que se han salvado de múltiples incendios.

Continuamos descendiendo lentamente de loma en loma por una zona devastada por los incendios donde la aliaga y otras zarzas campan por sus anchas. Se vislumbra Famorca al fondo. Vienen farallones más altos que también tienen algo de nieve.

Entramos a Famorca por un camino carretero, bebemos en la Plaza de la Font y por el pequeño arco que forman unas casas salimos al PV CV-168 que en algo más de dos kilómetros nos llevará a Fageca. No hemos visto ni un alma mientras cruzábamos el pueblo.