Posted by : Vaig a Peu sábado, 7 de mayo de 2011

COMPONENTES: VICENTE, PATRO, LOURDES Y MIGUEL


ITINERARIO:

Autovía hasta Petrel, salida Polígono Salinetas, antes de  cruzar por debajo de la autovía, continuar recto, ver marcas PR y seguirlas por la estrecha carreterita entre casas de campo hasta la casita forestal, en esta zona dejamos el coche.

Iniciamos por la izquierda por camino de herradura y paralelos a la ladera de la montaña, en cincuenta metros señales verticales y mojones nos indican el comienzo de la senda de subida que ya no tiene pérdida, es el PR-V 36. Senda muy definida y bien cuidada que entre largos lazos y zigzag nos va elevando cómodamente recorriendo de lado a lado la cara norte de la sierra.











Pronto llegamos al collado, con preciosas vistas a Petrel, Elda, Novelda, Salinas y Sax. Ahora seguimos ascendiendo suavemente y acercándonos a la cima, a la que llegamos después de dos pequeños repechos del camino.













Apenas se distingue, puesto que es un montón de piedras pequeñas (1.142 m). Al norte tenemos los profundos cortados y vías ferratas, hacia el sur distinguimos el Despeñador (1.261 m), los Rasos del Catí, Rabosa, Rincón Bello y el Maigmó (1.296 m), la costa  y el Cid o Chaparral (1.104 m) al que ahora nos dirigimos.









Iniciamos descenso pronunciado y vertical hasta el camino, al mirar atrás vemos el recto perfil este de la sierra, dejamos a nuestra izquierda la bajada el Contador por la que descenderemos al regreso. Ahora estar atentos a los mojones e inicios de sendas a nuestra izquierda para tomarlos todos, con lo cual iremos cerca del precipicio y evitaremos el camino carretero, haciendo más bonito el recorrido.


Y por fin afrontamos la última rampa, corta pero con un buen desnivel, que una vez superadas unas antenas de telefonía, llega el punto geodésico (1.104 m) ahora si con un buen pilón de cemento. A continuación las mismas rocas forman un espléndido mirador con respaldo para almorzar escrutando el valle del Vinalopó, y en donde también hay pequeñas imágenes religiosas y un buzón con puerta para dejar notas y comentarios escritos.

Si seguimos el cordal, bajaríamos un poco hacia un núcleo de antenas más aparatoso y a la senda del PR-V 325 que nos llevaría a Novelda.

Para el regreso deshacemos camino hasta el Contador, también se puede, antes de llegar a la rampa, ver mojones, bajar por la izquierda por senda encajonada de pequeñas carrascas y con zigzag rápidos, pero preferimos el itinerario anterior mucho más abierto y con extensas vistas hasta el mar.

La del Contador es una preciosa senda por la umbría que en escalonadas zetas nos va descendiendo paulatinamente hasta enlazar con el camino de herradura que viene desde la zona del Pantanet y Rabosa, serpenteando toda la sierra por su cara norte. Al poco pasamos por de bajo de la vía ferrata del Cable del Cid, que en ocasiones se oyen y pueden verse los afanados escaladores colgados de las paredes.

En algo menos de treinta minutos por camino llegamos al aparcamiento, finalizando la excursión de hoy, que no por cercana es menos intensa y agradable.

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