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Posted by : Vaig a Peu
sábado, 15 de febrero de 2014
Los primeros
indicios de poblamiento se encuentran en el yacimiento de Sa Cova de Dalt,
habitada en el Neolítico y en las estaciones de arte rupestre del Barranc del
Xorquet y La Cueva de las Letras o Peña Escrita. Restos de asentamientos
ibéricos se encuentran en Cueva de Dalt, en paraje de La Montanya y en el
castillo (La Caseta de los Moros). En época árabe pertenecía a la jurisdicción
de la ciudad de Denia. Hay noticias que en el 1090 el Cid a su paso por el
Portus Tarna (El Pueblo Alto), se paró en el castillo de Tárbena. Al abril de
1245, el caudillo árabe, al-Azraq y el infante Alfonso de Aragón firmaron el “Pacto del Pouet” por
el cual el árabe se declaraba vasallo del rey Jaime I, entregándole,
inmediatamente los castillo de Pop y Tárbena, reteniendo por un período
determinado el resto de castillos: Margalida, Cariola, Castell de Castells,
Gallinera, Alcalá y Perpuxent. Tárbena participó activamente en la revuelta de
al-Azraq (1248-58). Sofocada la rebelión, Jaime I, entregó el castillo, el
valle, fortificaciones y villas de Tárbena, al mudéjar Mohámed ‘Amr ibn Isahq.
El apoyo dado por ibn Isahq a los rebeldes de Murcia, provocó su expulsión del
Reino de Valencia, en el 1268. Entonces hizo donación de Tárbena (1268) a su
concubina, Berenguela Alfonso de Molina, quien murió sin descendencia.
Posteriormente al 1274, regresa a hacer donación de Tárbena, a su nueva
amanceba, Sibila de Saga. El castillo de Tárbena, fue uno de los focos
importantes de la revuelta de Ibrahim (1276-77), por este motivo sofocada la
rebelión los mudéjares de Tárbena fueron expulsados. Fue entonces cuando Pedro
el Grande otorga carta puebla, según la cual se asentaron cuarenta pobladores
cristianos en el valle, 1280. Poco duraron los cristianos en Tárbena, al cabo
de poco tiempo el valle volvió a ser habitado por mudéjares. En el 1297, Jaime
el Justo, cedió en honrado feudo el castillo y villa de Tárbena a Bernardo de
Cabrera. En 1310 consta como propiedad de Bernardo de Sarriá, casado con Isabel
de Cabrera; a la muerte de Bernardo todas sus propiedades pasaron al infante
Pedro de Aragón. Formando parte del Ducado de Gandía. En el 1429, el infante
Juan vendió, con derecho de remisión, el castillo y lugares de Tárbena a Jaime
Beneito y a Pedro Pérez por 46.000 sueldos. Después, haciendo huso del derecho
de remisión, vuelve a venderla a Guerau Bou, igual hizo con Callosa. El nuevo
señor vinculó las baronías de Callosa y Tárbena en 1458. La vinculación terminó
con la muerte sin sucesión del quinto poseedor de la baronía, Jaime Bou. Luisa
Bou, casada con Miguel de Montcada, retuvo los derechos sobre el señorío. Iniciándose
de esta manera un pleito que dura alrededor de dos siglos. Con la expulsión de
los moriscos (1609), el valle de Tárbena, queda totalmente despoblado. La
baronesa de Tárbena, Catalina de Montcada y Bou, otorga carta de población a
diecinueve pobladores venidos de Mallorca. Un año después hubo un nuevo
asentamiento con veintiocho nuevos pobladores isleños. Postreramente al 1616 se
asentaron veinticuatro baleares más.
CÓMO LLEGAR: Por la Autopista AP-7 hasta Benidorm, salida
nº 65 BENIDORM (LEVANTE) / CALLOSA D’EN SARRIÁ, por la CV-70 hacia La Nucia y
Polop, por la CV-715 a Callosa d’en Sarriá, Bolulla y Tárbena. Dejar el coche
en el aparcamiento apenas se sube la cuesta, donde hay un pequeño monumento que
conmemora la expulsión de los moriscos en 1609.
ITINERARIO: TÁRBENA /
ALJIBE / BARRANC DE LES LLETRES / MIRADORES / BARRANC DE LES VIUDES / CRUCE
CARRETERA CV-752 / PISTA DE TIERRA CASERÍO BIXAUCA / FONT D’OLBIS / BARRANC DEL
PAS / CAMINO / CRUCE CARRETERA CV-715 / SOLANA DEL CARRASCAL DE PARCENT /
CARRETERA INTERIOR / VADO BARRANC BINARREAL / SUBIDA CAMINO CEMENTO / FONT DE
BENISSALIM / CARRETERA CV-715 / 1ª CALLE A LA IZQUIERDA / TÁRBENA.
COMPONENTES: VICENTE Y
SANTI.
LA RUTA: Era tiempo de volver a Tárbena. Soy un nostálgico de los almendros en flor y es el sitio ideal para tomarle el pulso a la naturaleza, si en estas fechas los almendros están floridos la primavera no tardará en llegar, mi madre lo decía así: Si la Candelaria flora, el hivern fora, y si no flora, ni dins ni fora.
LA RUTA: Era tiempo de volver a Tárbena. Soy un nostálgico de los almendros en flor y es el sitio ideal para tomarle el pulso a la naturaleza, si en estas fechas los almendros están floridos la primavera no tardará en llegar, mi madre lo decía así: Si la Candelaria flora, el hivern fora, y si no flora, ni dins ni fora.
Iniciamos desde el aparcamiento. Hace un día fresquito pero precioso sin rastro de nubes. Desde el mirador que hay antes de llegar al panel de la ruta, tenemos unas vistas impresionantes con los primeros almendros en flor y las ruinas del Castillo de Tárbena.
Continuamos por el camino pavimentado de cemento que nos eleva entre los bancales con muretes de piedra seca y almendros floridos que pertenecen a las fincas más cercanas al pueblo. En la parte alta predominan los olivos; seguimos por la izquierda y se inicia un descenso por la derecha.
Entramos en el Barranc de les Lletres, cuyas laderas han sido aprovechadas mediante terrazas abancaladas para el cultivo, es el aprovechamiento total de la tierra existente. Disfrutamos de unas panorámicas sorprendentes con las plataformas de almendros en flor y al fondo la visión de las grandes montañas, con l’Aixortá dominante.
Este sendero escalonado desciende entre los márgenes de los bancales con pequeñas y cuidadas huertas para el consumo diario; pasamos cerca de un antiguo aljibe que todavía rezuma agua y una diminuta casa de aperos; enfrente, el barranco tiene una apertura en forma de desfiladero por donde se asoman las grandes montañas y nos muestra un paisaje alpino.
Conectamos con un camino flanqueado por pinos para girar a la izquierda, y entrar en el lecho del barranco, también abancalado, y comenzar a subir por la otra ladera, que en su parte alta hay una zona escalonada de bancales de almendros que veíamos desde la otra parte.
En esta especie de collado el sendero continua por la derecha, pero hoy vamos a hacer una variante de ida y vuelta. Seguimos el sendero de la izquierda que por detrás de los bancales comienza a elevarnos y coronamos este cerro (680 m.) tiene tres posiciones y tenemos vistas maravillosas en 180º. Primero la zona abancalada de Tárbena con la Sierra del Ferrer y el Bérnia al fondo, después Sierra Helada con la playa del Albir y Benidorm en los extremos; y por último la parte alpina, con el Ponoig, y el monte Cabal, asomando por detrás el Puig Campana, y finalizando con el Morro Blau y l’Aixortá, todo un espectáculo.
Descendemos hasta el collado y proseguimos de frente recorriendo la ladera que es más rocosa y menos cultivada, al llegar al fondo de este cerrado valle, seguimos rodeándolo por la otra ladera, donde entre pinos nos elevamos un poco hasta conectar por la izquierda con una ancha pista de tierra. Hacia atrás damos la última mirada a l’Aixorta y por la derecha al Bérnia, que luego veremos desde otras posiciones.
La Pista acentúa la subida y en el collado dejamos este precioso valle y entramos en el Barranc de les Viudes. Pasamos a un nuevo valle, y tras un suave descenso comenzamos a rodear la gran mole del Pinyol Roig (778 m.) hasta que llegamos a la carretera CV-752 a Castell de Castells. Transitamos unos cuarenta metros por ella y la cruzamos.
En la otra parte, marchamos por la derecha, con la nueva pista de tierra que comienza a elevarnos por la ladera de la Penya Pinets (806 m.), en la bifurcación seguimos a la derecha rodeando la loma, y salimos a la solana donde volvemos a tener majestuosas vistas del Castillo de Tárbena, el Bérnia y la Sierra del Ferrer.
Vamos rodeando la Penya y por la derecha vemos gran cantidad de colmenas en plena producción, alineadas sobre viguetas de cemento. Alcanzamos nuestra mayor elevación de hoy (780 m.) e iniciamos leve descenso hacia el caserío de Bixauca y la Font d’Olbis.
Nos refrescamos en la Font d’Olbis y continuamos bajando, cerca de una casa derruida buscamos un buen sitio para el merecido almuerzo. El sol aprieta y cambiamos a manga corta. Las vistas hacia la muela de Penya Pinets con las franjas de almendros en flor son preciosas.
Repuestos, caminamos en descenso hasta otra casa derruida, donde se inicia el Barranc del Pas. Las marcas del PR continúan por la derecha, pero hace unos años roturaron y abrieron nueva senda por la ladera de la izquierda que vamos a seguir. Al principio tenemos que subir y luego se torna más cómoda. Hacia atrás la panorámica de las terrazas de almendros floridos.
Junto a un pequeño corral derruido conectamos con un camino que primero entre pinos, luego entre carrascas y casas de campo nos lleva hasta la carretera CV-715 que va al Coll de Rates. La cruzamos por la derecha y a unos metros tenemos un camino de cemento que nos desciende al pequeño valle de la Solana del Carrascal de Parcent.
Este es un bello paraje entre chalets, casonas de campo y terrazas de pequeños huertos de almendros, cerezos y olivos, con la barrera protectora de la Sierra del Ferrer. El descenso termina al llegar a la carreterita interior que recorre el valle, la transitamos por la derecha.
Pasamos por delante de lindos chalets hasta llegar al bonito Hotel Rural Lehmi, donde una vez superadas las instalaciones cruzamos por la izquierda el vado del Barranc Binarreal y tomamos el estrecho camino de cemento que tenemos enfrente.
Empieza una fuerte subida por la ladera umbrosa del valle, totalmente abancalada en escalonadas terrazas donde impera el cultivo de los cerezos que todavía no han comenzado su floración. Tras el esfuerzo llegamos a la fresca Font de Benissalim que nutre de agua esta ladera.
Nos queda otro repecho a la sombra de una hermosa carrasca y alcanzamos la carretera donde tenemos una vista completa de las ruinas del Castillo de Tárbena, y una posición poco frecuente de la Sierra de Bérnia entre los almendros.
Entramos triunfantes en Tárbena, con los sentidos henchidos del color de los almendros. Ha sido una preciosa excursión sensorial.
AGUA EN RUTA: SI.
DISTANCIA: 16,14 KM.
TIEMPO: 04:50 HORAS.
ALTURA MÁXIMA: 780 M.
(Loma Penya Pinets)
ALTURA MÍNIMA: 380 M. (Vado
Barranc Binarreal)
DESNIVEL POSITIVO: 667 M.
DESNIVEL NEGATIVO: 655 M.
DIFICULTAD: MODERADA.