sábado, 30 de marzo de 2013

BENICADELL DESDE TURBALLOS


La majestuosa sierra de Benicadell se yergue con fuerza en el paisaje, coronada por su elegante cresta rocosa reconocible a grandes distancias: sus perfiles, según las distintas vertientes, son facetas de una misma montaña, que es siempre la misma y diferente. La nítida morfología amurallada del largo dorsal orientado hacia el todavía distante mar, separa con sus espadines calizos dos comarcas naturales, dos amplios valles profundamente marcados por la milenaria intervención del hombre, la Vall d’Albaida y la Foia del Comtat, a la vez que sirve a una convencional frontera provincial entre Valencia y Alicante. La sierra de Benicadell se extiende a lo largo de unos veinticinco kilómetros en dirección nordeste- sudoeste, separando las comarcas de la Vall d’Albaida (perteneciente a la provincia de Valencia), por el norte, y del Comtat (correspondiente a la provincia de Alicante), por el sur. Su núcleo principal está adscrito a los términos municipales de Atzeneta d’Albaida, Beniatjar, Carrícola, Albaida y Salem, en lo que afecta a la provincia de Valencia, y a Muro de Alcoy, Gaianes, Beniarrés y l’Orxa, en lo relativo a la provincia de Alicante. Por el este, la sierra de Benicadell finaliza en los barrancos por los que discurre el río Serpis que, procedente de la Sierra Mariola, de las tierras alcoyanas, del embalse de Beniarrés y de l’Orxa, se dirige por el imponente “Estret de l’Infern” hacia Villalonga y Gandia, en donde desemboca en el Mediterráneo. Por el oeste, la sierra de Benicadell concluye en el Port d’Albaida (620 metros de altitud), por donde pasa desde hace muchos siglos la principal vía de comunicación entre Valencia y Alicante por el interior, o lo que es lo mismo, por Xàtiva, Albaida, Muro de Alcoy, Cocentaina y Alcoy. La sierra de Agullent (que comienza en el antedicho puerto de Albaida) es una prolongación natural de la sierra de Benicadell, y se extiende unos doce kilómetros hacia el oeste, delimitando también las provincias de Alicante (Muro de Alcoy y Agres) y de Valencia (Albaida, Agullent, Bocairent y Ontinyent), finalizando en el “Pou Clar”, en Ontinyent. Los incendios forestales han castigado durísimamente a estas abruptas sierras de Benicadell y Agullent, habiendo desaparecido casi totalmente los grandes pinares que se extendían antaño, por ejemplo, por el Port d’Albaida. De todos modos, siempre se ha distinguido con claridad la diferente vegetación de las dos vertientes del Benicadell: la norte siempre ha contado con una flora muy rica, mientras que las laderas meridionales han presentado generalmente un aspecto más árido.
CÓMO LLEGAR: Por la A-7 AP-7 en dirección Valencia, salida en la rotonda elevada SAN VICENTE DEL RASPEIG/UNIVERSIDAD, continuar dirección Alcoy, tomar la salida nº 66 MURO DE ALCOY NORTE, en la rotonda tomar la salida 1: VEREDA DEL VENTORRILLO, continuar durante 2 km hasta llegar a Turballos. Se puede aparcar a la entrada y a la salida del pueblo.
ITINERARIO: TURBALLOS / CAMÍ DE GAIANES / CREU DE GAIANES / CALVARI / ERMITA Y FONT DE SANT FRANCESC / LES LLOMETES / COVA NEGRA / COLLADO, CRUCE CON OTROS SENDEROS / NEVERA DEL BENICADELL / CIM DEL BENICADELL / COLLADO / CASA DE DON MIGUEL Y CAVA DE CARCAIXENT / FONTANARS D’ALBAIDA / PORT D’ALBAIDA / CARRETERA N-340 / TURBALLOS.
COMPONENTES: VICENTE Y SANTI.






LA RUTA: Hoy hemos cambiado un poco el itinerario del PR-CV 184 y en vez de salir desde Muro de Alcoy, lo hacemos desde Turballos. Nos perdemos el bonito paraje de la Font de la Carrasca pero evitamos tramos de carretera y tener que cruzar un puente sobre la autovía. Desde el Port d’Albaida no podemos evitar el asfalto pero al memos es un tramo sin nada de tráfico.

En Turballos, un pueblo de la serranía de Alcoy, en la provincia de Alicante, vive desde hace casi treinta años una comunidad de cristianos que optaron por la sencillez y la no-violencia. Bebiendo de la tradición de las comunidades del Arca, de Lanza del Vasto, discípulo cristiano de Gandhi, han pasado por distintas fases y hoy se denominan "Comunidad Ecuménica y No-Violenta". Y, en esas breves palabras se descubre toda su esencia. La forman hoy algunos matrimonios, personas que desean hacer una experiencia de comunidad, y su fundador, Vicente Micó, sacerdote de la diócesis de Valencia. Cuando llegaron al pueblo era una aldea abandonada por causa de la emigración. Hoy es un centro espiritual que atrae a jóvenes en búsqueda y a quienes desean parar para vivir en silencio. Organizan talleres y retiros en los que se puede participar.









Atravesamos el pueblo en total calma y silencio a estas horas, hoy la iglesia está cerrada y no se ve a nadie por la calle. Observo que siguen rehabilitando casas con mucho esmero. Continuamos por la izquierda siguiendo el Camí de Gaianes.





Siempre me ha llamado la atención un cartel a la izquierda donde se inicia otro camino, “Font del Uito”. Hoy tomamos esta variante, que asciende entre bancales de almendros pero no vemos ni rastro de la fuente y desistimos. Diagonalmente volvemos al camino principal. Pasamos por un cuidado bancal de cerezos en flor, y entre olivos tenemos una bonita vista de una de las paredes del Benicadell.










A la entrada de Gaianes vemos criaderos de palomas, quizás haya afición a la colombicultura entre los vecinos. Estos pueblos de montaña son realmente tranquilos. Hay una pequeña área recreativa junto a la Cruz de Gaianes. Torcemos a la izquierda por el Camí del Calvari.









El camino asciende entre centenarios y espigados cipreses, con viejos muros de piedra seca, salpicados por hornacinas labradas en piedra con una cerámica en su interior con representaciones del Vía Crucis. Llegamos a la Ermita de Sant Francesc de Paula con su fuente que mana desde el interior de la misma.





Continuamos subiendo por detrás de la Ermita, alcanzamos el depósito de aguas potables; termina el asfalto entre pequeños y cuidados bancales ganados a las faldas de la sierra, es la zona de les Llometes. En una especie de planicie donde hay un poste metálico con paletas informativas, dejamos el camino por la izquierda y por pedregosa senda tomamos clara dirección a las paredes de la sierra.









Comienza lo bueno. Mirándolo de frente no parece haber resquicio por donde subir, es un trayecto corto pero con mucho desnivel y las enormes paredes impresionan. Pero la senda va buscando resquicios, primero con largas rampas, acortándolas en los tramos más encrespados.






La senda está bien marcada y es muy visible. Hay abundante matorral de sierra y esporádicos ejemplares de pino. Nos elevamos con rapidez y es regocijante, al volver la vista atrás, ver la altura ganada, las vistas se amplían en el horizonte, comenzamos a ver el pantano de Beniarrés, la sierra de la Almudaina, la Serrella, la Safor…











Ya tenemos encima las paredes, y parece que no podamos seguir, pero la senda va virando a la izquierda y junto a las paredes pasamos entre unas carrascas buscando otro espacio más abierto en la loma. Vemos Aitana en la lejanía.












Por la loma todo cambia, se apacigua el desnivel y vemos próximo el fin. Pasamos junto a la Cova Negra, con su gran boca. No descendemos a su interior y proseguimos hasta el collado donde otra piqueta metálica informa del resto de senderos.




Marchamos por la derecha, por la maravillosa senda de la umbría del Benicadell, justo en el límite de las dos provincias, a la izquierda Valencia y a la derecha Alicante. Tomamos el desvío a la derecha para subir hasta la Nevera del Benicadell, en un hermoso rellano con preciosas vistas. Es una de las estructuras mejor conservada, aunque desgraciadamente en el fondo del pozo la gente inculta, aprovecha para tirar basura.









Bajamos de nuevo a la senda principal. Desde esta posición tenemos una vista sublime del sendero que nos queda por recorrer  hasta la cima. Al ser semana santa hay mucha afluencia de gente. Sopla un poco de aire que acelera el paso de las nubes, dándole un aspecto peculiar a la zona de Albaida y su embalse.







Pasamos el cruce de la senda que viene desde Atzeneta y comienza la hermosa subida que en varias lazadas nos eleva con facilidad. Nos cruzamos con mucha gente que baja o sube. Arribamos al minúsculo collado con las ruinas de la pequeña casa junto a una higuera, han tapado con una reja el agujero del pozo.






Por la izquierda iniciamos la subida de la cresta hasta el punto geodésico. El acceso es sencillo, si no tienes miedo puedes saltar de roca en roca o rodear por la izquierda haciendo una simple trepada, manos en la roca. Pero hay mucha gente y esto lo complica un poco formando un atasco. Cumbre del Benicadell (1.104 m.), pese a su escasa altura impresiona estar en su exigua base.










El día se va aclarando y las panorámicas son preciosas. Descendemos hasta la parte trasera del collado para nuestro merecido avituallamiento. De cara al sol tenemos buenas vistas a la cresta con el punto geodésico y al pantano de Beniarrés.


Emprendemos el regreso deshaciendo camino hasta el collado por donde hemos subido, ahora continuamos de frente por la preciosa senda. Desde la cumbre al Port d’Albaida hay aproximadamente unos ocho kilómetros de elegante senda montañera, que recorre toda la umbría del Benicadell con apenas 600 metros de desnivel. Pese a los múltiples incendios que ha sufrido esta zona, ha logrado recuperarse gracias a la humedad y situación de esta cara norte.









Arribamos a las ruinas de la casa de don Miguel donde enfrente está la Cava de Carcaixent, que no tiene cúpula y los contrafuertes que la sostienen le otorga aspecto de muralla fortificada. Poco después llegamos a la zona húmeda de Fontanars d’Albaida donde cambiamos de vertiente.



Por el Barranc de Fontanars y su perfecta calzada nos plantamos en el Port d’Albaida. Proseguimos por la izquierda junto al quitamiedos, siguiendo las marcas de PR que nos dirigen a una rotonda y a una carretera sin tráfico, para más tarde, antes de llegar a una acera con farolas, torcer a la izquierda por otra carreterita que en dos kilómetros nos dejará en Turballos. Es la parte más ingrata del recorrido pero llegar a Muro todavía es peor.












Descontado este último tramo la excursión es espectacular, Exigente en su primera parte y tranquila y reposada en el regreso.

RECORRIDO: CIRCULAR.
AGUA EN RUTA: SI. En Gaianes y en la Font de Sant Francesc
DISTANCIA: 20,660 KM.
TIEMPO: 05:55
ALTURA MÁXIMA: 1.104 M. (Cumbre del Benicadell)
ALTURA MÍNIMA: 435 M. (Barranc del Rull, Turballos)
DESNIVEL POSITIVO: 923 M.
DESNIVEL NEGATIVO: 912 M.
DIFICULTAD: ALTA.

No hay comentarios:

Publicar un comentario