sábado, 27 de abril de 2019

LA MOLATA DE CHARÁN Y LA CASCADA DE HONDARES DESDE LAS CASICAS DEL PORTAL.

Desde tiempos remotos, las aguas que lamen las estribaciones de la Molata de Charán (Moratalla, 1416 metros) han labrado un despeñadero o precipicio, una profunda hendidura conocida por el Barranco del Agua que desemboca en el Rincón de las Cuevas, imponente anfiteatro rocoso de más de sesenta metros de altura que ofrece al visitante alegres saltos de agua, apriscos con pinturas rupestres donde aún encuentran cobijo pastores y rebaños, un puente de tablas inseguras, una esbelta chopera y mullidos prados ribeteados de flores silvestres, un escenario muy placentero que sirve de paseo a los vecinos de Benizar y a los de las poblaciones vecinas. No acaban aquí los estímulos, pues siguiendo la umbría del calar de Benizar se abre un sendero flanqueado de almendros que lleva al Molino de Benizar, hospedería en cuyos alrededores se despeñan varias cascadas que provienen de la Fuente de Arriba, otro espacio de gran amenidad situado frente al castillo de Benizar, una de las fortalezas más singulares e inaccesibles del antiguo Reino de Murcia por lo arriscado de su emplazamiento: asentada sobre dos enormes muelas rocosas, el único modo de llegar a la base de sus murallas era escalando o utilizando escaleras de madera. La molata de Charán está a la espalda de las Casicas del Portal, caserío que se asoma a la carretera que enlaza Benizar y el Campo de San Juan, al noroeste de Moratalla. Molata, derivación de muela rocosa, es un vocablo muy habitual en las comarcas del noroeste de la Región de Murcia. Sus cumbres, romas y amesetadas, son de roca caliza, carecen de vegetación, guardan restos de poblamientos de origen agrícola o militar, y dominan una vasta extensión de tierra. En el regazo de esta molata, perturbada por la cercanía de una cantera, se encuentra Charán, aldea que a mediados del siglo XX tenía más de un centenar de vecinos y era más importante que El Sabinar y Benizar. La soledad, el paro, la construcción y el turismo se llevó a los más jóvenes, hasta que en 1980 quedó totalmente despoblada; y así permanece, si bien cabe precisar que en los últimos años se han vendido casi todas las viviendas a naturalistas de Cartagena, Murcia, Caravaca y Moratalla, y en un par de ellas ya han colocado nuevas rejas y portones. A Charán se llega desde las Casicas del Portal por un camino polvoriento que abraza la cara nordeste de la Molata, entre parcelas de almendros, cebada, lavanda, espliego, un nogal de notables proporciones, choperas, peonías e iniestas que en primavera pintan el campo de amarillo. A mitad de trayecto salen al paso las ruinas del cortijo de las Hoyas y quinientos metros más allá se ven las casas de Charán, topónimo que ni los más viejos del lugar conocen su significado. A lo lejos, la aldea emite una cierta nostalgia; quizá sea el silencio que preside la aldea, la ausencia de perros, los pozos de agua cristalina abandonados, las puertas desvencijadas, los tejados hundidos o la belleza marchita de una era de grandes dimensiones a la que dan sombra dos espigados y frondosos olmos centenarios. (La Verdad.es)

miércoles, 17 de abril de 2019

MONTE ARABÍ

“La altura de su cumbre, lo agreste de sus hondonadas, y lo imponente de sus cinglas desgajadas, rotas y llenas de cavidades y abrigos, hubieron de llamar la atención de los primitivos, y fueron sus lomas suaves, asiento de pueblos, y sus rocas, lugar de santuarios, y sus cinglas, atalayas magnificas y puntos de segura defensa.”  Cayetano de Mergelina, 1922 
El Monte Arabí destaca del resto de sierras y montañas de los alrededores por su peculiar modelado geológico. El modelado Kárstico y la erosión del agua y viento, han configurado cuevas, galerías y formas ciertamente curiosas en sus rocas. Es la montaña mágica de Yecla, un lugar muy rico en yacimientos y restos arqueológicos de todo tipo y con una flora y fauna de gran valor. Ha sido propiedad de varios particulares, el último de ellos D. Francisco Galán Giner, doctor en medicina de Elche, que a finales del siglo XIX lo vendió al Ayuntamiento de Yecla y en 1998 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. El dosel vegetal está dominado por el pino carrasco (Pinus halepensis), que se encuentra por todo el monte. Todavía se encuentran encinas, sobre todo en umbrías, a las que acompañan numerosas especies de flora, algunas de ellas endémicas.Otro de los aspectos interesantes del Arabí es la abundancia y variada fauna que alberga. Además de numerosos invertebrados, reptiles y mamíferos, el paraje sobresale por la elevada riqueza ornítica que cobija, siendo probablemente una de las zonas con mayor diversidad de aves de todo el Altiplano Jumilla-Yecla.

sábado, 13 de abril de 2019

VALLADA: PENYA DE L’ÁGUILA, EL CASTELL, EL PENYÓ Y EL TOSSAL.

El Castillo de Vallada conocido también como Castillo de Umbría, es un castillo de origen musulmán situado en el paraje de La Peña sobre un montículo a 553 metros de altitud, desde donde se domina todo el valle del río Canyoles. Formó parte de la red de castillos de defensa de este valle, junto a los castillos de Játiva, Montesa y Mogente. Demolido parcialmente en el siglo XIV, el castillo resultó nuevamente dañado durante el terremoto de 1748. El recinto, de forma pentagonal, se localiza en la zona más abrupta de la cumbre, en un extremo sobre el precipicio, de forma que solo podía ser atacado por el oeste, donde se localizaban dos torres gemelas y un muro con pasillo y almenas. Construido con fábrica de mampostería y tapial, cuenta con otras torres y dependencias, así como aljibe. Vallada tiene su origen en una antigua alquería musulmana que se mantuvo tras la conquista hasta la época de Pedro III el Grande. Fue poblada con cristianos el 16 de octubre de 1289 por Alfonso III, juntamente con Montesa. Jaime II la entregó en 1319 a la Orden de Montesa, en cuyo señorío se mantuvo hasta el siglo XIX. Galcerà de Borja, Maestre de la Orden, la hizo villa independiente entre 1547 y 1561. El castillo fue muy codiciado por los musulmanes de la zona, dada su estratégica situación y a su inexpugnable emplazamiento.

sábado, 6 de abril de 2019

SUBIDA A LA SIERRA DE LA PALERA

El relieve del Cañón de los Almadenes es el resultado de los procesos geológicos internos y externos que se han sucedido desde la individualización de la Cordillera Bética, los factores climáticos, litológicos y tectónicos  intervienen conjuntamente, determinando las características de los procesos que se dan en la formación del relieve. Los relieves más destacados de esta área corresponden a La Palera y el Alto del Almorchón, mientras que el resto de la morfología está vinculada a zonas deprimidas, dependiendo de la litología y de la estructura de los materiales, el cañón de los Almadenes tiene casi cuatro kilómetros de longitud y una altura media de 70 metros, llegando a alcanzar en algunos tramos una profundidad de 150 metros. Fue tallado por el río Segura al penetrar por las estribaciones de la Sierra del Molino y la Palera. En sus márgenes han intervenido tres factores principales: Los materiales calizos y dolomíticos que se disuelven con facilidad, muy vulnerables a los procesos de erosión. La presencia de una red de fallas y fracturas notable que ha quebrado dichos materiales. También han contribuido los plegamientos de la alineación montañosa Sierra del Molino-Palera. El río Segura, que entró por esas fracturas, fallas y diaclasas, excavándolas y ensanchándolas. Las condiciones climáticas de la zona intensifican los procesos de disolución de las rocas carbonatadas, aprovechando las superficies de discontinuidad, así como una tectónica intensa que favoreció la existencia de fracturas. Su formación seguramente se vería potenciada por la etapa de levantamiento general de la región posterior al plegamiento de la Cordillera Bética, que pudo favorecer el encajamiento de la red hidrológica.

miércoles, 3 de abril de 2019

SUBIDA AL BOLÓN

La Sierra del Bolón es una elevación montañosa del término municipal de Elda, en la provincia de Alicante, que  alcanza los 652 m. Se trata de una pequeña sierra englobada en los sistemas prebéticos que se extienden al oeste de dicha población, muy próxima al núcleo urbano. Su vegetación es mayoritariamente esteparia, con abundancia de matorrales, pero contando también con ejemplares de pino carrasco. Cerca de la cima, y sobre unas formaciones rocosas, el Centro Excursionista Eldense erigió una cruz en memoria de los montañeros fallecidos. En la ladera sur de la sierra, en la zona conocida como Peñón del Trinitario (ya que recuerda a la figura de un monje), han aparecido restos de un poblado de la Edad del Bronce, así como una necrópolis de esa época. El enterramiento más famoso se descubrió en 1975, consistiendo en los restos óseos de un niño de corta edad descansando sobre una bolsa de esparto, material que fue datado en el año 1700 a.C.. Ininterrumpidamente desde el año 1959, todas las noches del día 5 de enero una comitiva formada por voluntarios del Centro Excursionista Eldense y demás ciudadanos que deseen participar libremente, realizan un descenso con antorchas desde la cima del monte. El fuego proviene de una hoguera que se enciende previamente en lo alto de la montaña. La fila de antorchas simboliza la estrella que guio a los Reyes Magos hacia el portal de Belén, y es el preludio de la Cabalgata de Reyes que se realiza anualmente en la ciudad, como ocurre en otras muchas poblaciones de España.
CÓMO LLEGAR:Por la autovía A-31 dirección Elda, salida nº 207 ELDA SUR/MONOVAR, entrar a Elda hasta la Avenida de la Melva. Aparcar junto al IES La Melva.
COMPONENTES:VICENTE, JUANJO, TONI ALMELA, PEPE COVES, JUANITO, PACO VERDÚ, ANTONIO SOLER, PELEGRIN, CERVERA, TELE, CERVERETA,
ITINERARIO:PUENTE DE LA MELVA / CRUCE / SENDA VÍA CRUCIS / CRUZ / CIMA DEL BOLÓN / SENDA DE LOS REYES MAGOS / CRUCE / PUENTE DE LA MELVA.